por Matthew Cullinan Hoffman
CIUDAD MÉXICO 12 de septiembre 2011 (Notifam) – A la vez que México se mueve en dirección de reglamentar la fertilización in vitro, el Secretario de Salud de México ha declarado su oposición de que se permita la congelación de los embriones, una práctica que ha resultado en la producción, y en últimas instancias, en la destrucción de miles de vidas de seres humanos cada año.
Si los legisladores federales siguen su ejemplo dado, México se unirá a Alemania, Italia, y Costa Rica, en donde se prohíbe la congelación de los embriones.
A pesar de que, durante los pasados meses, José Ángel Córdova Villalobos ha resistido los intentos de que se pronuncie sobre el tema, finalmente él dio a conocer su posición durante una entrevista radial el pasado miércoles 7 de septiembre.
“Es preferible en este caso buscar la mayor eficiencia y el mayor, insisto, respeto a la vida del nuevo ser que se está gestando”, dijo Córdova Villalobos. Él añadió que sería mejor preservar los óvulos por medio del proceso de la vitrificación, en lugar de congelar los embriones.
“No se justifica que se queden embriones residuales, embriones que tendrían que ser crio-preservados”, dijo el secretario. Y “menos ahora” se justifica, él continuó diciendo, “porque hay otras técnicas en las cuales si eventualmente no se logró generar un embarazo por ese embrión que fue introducido en el útero, pues se pueden vitrificar, por ejemplo, los óvulos, y después ponerlo en contacto con un espermatozoide y poder nuevamente hacer el intento de tener un embrión para un embarazo”.
El doctor Manuel Ramos, un biólogo molecular y director de la división de bioética del Centro de Investigación Social Avanzada en el Estado de Querétaro, dijo que las declaraciones constituyen “un gran adelanto” a favor de la vida humana, pero añadió que el proceso completo de la fertilización in vitro es antiético.
“Esto es un gran adelanto”, le dijo a LifeSiteNews/Notifam (LSN), “porque las autoridades comprenden la importancia de no congelar los embriones”, y añadió que los legisladores de la nación “deben de escuchar y apoyar su opinión”.
Según Ramos, el proceso de producir unas grandes cantidades de embriones, y de congelarlos, han colocado a 150,000 vidas humanas en estado de congelación criogénica en México, habiendo un total de 5, 000,000 en el mundo.
Ramos expresó su esperanza de que la legislación pendiente ponga fin, al igual, a otras prácticas, tales como la compra y venta de los espermas y los óvulos, incluso de los propios embriones, al igual que su uso sin el permiso del donante. Él ofreció, como ejemplo, los casos que se han dado en que las personas rechazaron a sus propios hijos porque su color de piel no les era de su parecer, debido al uso no autorizado de las células reproductivas.
Sin embargo, él añadió que entendía que todo el proceso de la fertilización in vitro es objetable, y dijo que debe ser prohibido.
“Si se junta todo el panorama de la fertilización in vitro, es un panorama desalentador. Esto le causa daño a la mujer con la estimulación de los ovarios, (y) le causa daño a los embriones por medio de la manipulación in vitro. Los niños nacidos por medio de la fertilización in vitro, tienen casi el doble en el número de graves defectos natales. La tasa de defectos natales aumenta para los embriones que han sido congelados”, él dijo.