El hallazgo fue en la zona norte de la ciudad del citrus.
Fuentes judiciales relacionadas con la causa en la que se investiga la muerte de Milagros Azucena Lezcano, de 17 años, quien falleció producto de un aborto inducido, aseguraron que la víctima no tendría relación directa con el feto encontrado en un puente alcantarilla de Boulevard Ayuí, en la zona norte de Concordia.
Si bien en un primer momento se estableció esa posibilidad, los exámenes forenses certificaron que por las heridas provocadas por el brutal aborto practicado a Milagros, el feto debería haber quedado en pésimas condiciones. Mientras que el hallado en un brazo del Manzores -a fines del mes pasado- estaba en perfectas condiciones, inclusive con su placenta y cordón umbilical.
Las fuentes consultadas en el palacio de los Tribunales concordienses destacaron que ya hubo varias conversaciones con los padres, familiares y amigos de la menor fallecida, pero que no se ordenaron nuevos allanamientos vinculados con la causa.
Según el testimonio de los progenitores de Milagros Azucena Lezcano, ellos aseguraron a la Justicia que no tenían conocimiento que la jovencita estaba embarazada y mucho menos que se hubiera practicado un aborto.
Por otro lado, se precisó a Diario Río Uruguay que una de las medidas para investigar el hecho fue el pedido de las historias clínicas que están relacionadas con la causa. Lo que se sumará a los resultados de los análisis que se están realizando en la capital provincial, para determinar finalmente si habría relación entre los dos casos mencionados.
