Monseñor Francis Assisi Chullikatt, Observador Permanente del Vaticano ante las Naciones Unidas, recordó en una conferencia que la Iglesia Católica es partidaria del desarme nuclear para conseguir la paz del mundo.
“La Iglesia católica -afirmó- aborrece la idea de cualquier uso de armas nucleares" y que su objetivo "no es volver el mundo más seguro a través de la amenaza de las armas nucleares sino más bien, volver al mundo más seguro a través del compartido y verificable desarme nuclear".
Desde Kansas City, Missouri, Estados Unidos, hablando para Radio Vaticana, monseñor Chullikatt ofreció una ponencia sobre "La cuestión nuclear: el magisterio de la Iglesia y la situación actual", y dijo que "en una guerra nuclear no habrá vencedores y que solamente habrá víctimas".
A más de 20 años del fin de la Guerra Fría, existen 20.000 armas nucleares en el mundo repartidas en 111 enclaves distintos de 14 países, y cada año se gastan unos 100 millones de euros para el mantenimiento y la actualización de arsenal nuclear.
Monseñor Chullikatt recordó que el armamento nuclear "ha preocupado desde hace tiempo a la Iglesia Católica", y éste, además de devastación humana, implica fenómenos de radiación "que no pueden ser controlados".
Explicó también que en armamento nuclear se ha gastado hasta un trillón de dólares y que ese dinero podría haber sido invertido en proyectos de carácter social.
Finalmente, el Prelado denunció la falta de iniciativa al desarme, y recordó que no es suficiente la simple prevención de nuevo armamento nuclear, ya que "la verdadera paz requiere necesariamente el desarme completo", concluyó.+
Roma (Italia), 10 Ago. 11 (AICA)