sábado, 18 de noviembre de 2017

Los miles de pobres que comerán con el Papa este domingo

por Mercedes De La Torre
"No amemos de palabra sino con obras", ha sido el llamado de Francisco para vivir la caridad concreta.

El Aula Pablo VI del Vaticano se convertirá en un inmenso comedor a la hora del almuerzo y recibirá a miles de personas sin techo o que viven en situación de grave pobreza.
 
Una vez más el estilo pastoral del Pontificado de Francisco se palpa en Roma. Como signo concreto del Año de la Misericordia, el Papa instituyó la Jornada Mundial de los pobres que se llevará a cabo por primera vez este fin de semana en todas las diócesis del mundo.

En los alrededores del Vaticano la celebración de esta jornada ha iniciado hace casi una semana. A pocos metros de la plaza de San Pedro se han instalado unas carpas en la que se han ofrecido a personas desfavorecidas servicios sanitarios gratuitos, y para agradecer el trabajo de los voluntarios, el Santo Padre sorprendió con una visita inesperada la tarde de este jueves.

Un día histórico en el Vaticano 
Este domingo, sin duda, es un día que será recordado por muchos, no solo por los invitados de honor -personas sin casa o que viven en pobreza extrema, como refugiados políticos- que comerán con el Papa dentro de los muros vaticanos, sino también por muchos empleados de la Santa Sede e incluso miembros de la Curia.

Por primera vez en la historia, la sala nervi, el aula solemne de las audiencias papales, se convertirá en un gran comedor que hospedará alrededor de 1.500 personas pobres. Además, otros 2.500 desfavorecidos almorzarán en varios seminarios y colegios cercanos al Vaticano.

La logística del evento ha sido organizada principalmente por el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización y la Limosnería Apostólica, pero además han colaborado con la preparación de esta iniciativa diferentes realidades eclesiales, como la Comunidad de San Egidio, la Orden de Malta, Nuevos Horizontes, la Comunidad Juan XXIII entre otros.

Esta semana he conversado con algunos voluntarios de las duchas gratuitas localizadas a un lado de las columnas de la plaza de San Pedro y me han confirmado la alegría de muchas de las personas que acudirán a la Misa y después a la comida con el Papa.

Al hablar de personas sin techo que duermen en los alrededores del Vaticano, cabe recordar que recientemente surgió una polémica en Roma después de que la policía italiana retirara a la gente que dormía bajo las columnas de la plaza de San Pedro. La prensa italiana interrogaba si el Pontífice sabía sobre esta decisión y si la oficina de la caridad de la Santa Sede ofrecería una alternativa para esta gente, pero no hubo ninguna respuesta.

No se puede negar la molestia de algunos residentes cercanos ante el aumento de las personas sin hogar que han optado por dormir en los alrededores de San Pedro durante este Pontificado. Hasta ahora existe un dormitorio en un edificio cercano a la Curia general de los Jesuitas, el servicio gratuito de barbería y duchas que ofrece el Vaticano y numerosos voluntarios de distintas realidades eclesiales que cada noche ofrecen de cenar a personas sin techo. Entre los voluntarios hay un grupo de guardias suizos coordinados por el limosnero pontificio, monseñor Konrad Krajewski quien utiliza para la caridad todo el dinero recaudado por las bendiciones papales en pergamino.

Todo esto son pequeños, pero importantes, granos de arena.

Religión Confidencial   18/11/2017 01:00