dijo el Cardenal Sarah. “Cada nación tiene el derecho a distinguir entre refugiados genuinos y migrantes económicos… Si [los migrantes] son de otra cultura u otra religión, ponen en peligro el bien común de la nación”. El cardenal también dijo que Europa está experimentando una ‘callada apostasía’ al rechazar sus raíces cristianas.
Cada nación tiene el derecho a distinguir entre refugiados genuinos y migrantes económicos quienes no comparten la cultura de la nación, ha dicho el Cardenal Robert Sarah.
Al hablar en la conferencia Europa Christi en Polonia el domingo, el cardenal africano señaló que el país rechaza aceptar la “lógica” de redistribución de migrantes que “algunas personas quieren imponer”.
En comentarios informados por la revista polaca Gosc, el Cardenal Sarah añadió que así como cada migrante es un ser humano que debe ser respetado, la situación se vuelve más compleja si son de otra cultura u otra religión, y ponen en peligro el bien común de la nación.
Los líderes mundiales no pueden cuestionar el “derecho de cada nación a distinguir entre un refugiado político o religioso” quien es forzado a huir de su propia tierra, y “el migrante económico que quiere cambiar su lugar de residencia” sin adaptarse a la nueva cultura en la que vive.
“La ideología del individualismo liberal promueve una mezcla que está diseñada para erosionar las fronteras naturales de patrias y culturas, y que conduce a un mundo post-nacional y unidimensional donde lo único que importa es la producción y el consumo”, dijo el Cardenal Sarah.
Haciendo eco del papa Francisco, el cardenal dijo que las naciones europeas deben tomar parte de la responsabilidad si éstas han desestabilizado los países desde donde viajan los migrantes, sin embargo esto no significa cambiarse a sí mismas a través de la inmigración en masa.
El Cardenal Sarah lamentó también la secularización de Europa, diciendo que el continente ha estado en una crisis de civilización son precedente por los dos últimos siglos, comenzando con las palabras de Friedrich Nietzsche “Dios está muerto, y nosotros lo hemos matado”.
“Desde entonces Europa ha estado en una crisis continua causada por, entre otras cosas, ideologías ateas, sumergiéndose ahora en un nihilismo[1]”, dijo.
El Cardenal Sarah dijo que después del colapso de la Unión Soviética, cuando muchas naciones recuperaron su libertad y democracia, pareció que un nuevo y positivo período había comenzado para Europa.
Sin embargo, la Unión Europea decidió no volver a las raíces cristianas del continente, pero en cambio comenzó a construir sus instituciones sobre abstracciones tales como el libre mercado, equidad de individuos, y derechos humanos individualistas.
Hubo un error, dijo el Cardenal Sarah, porque todas las leyes deberían basarse en el concepto de dignidad humana, la cual sólo puede venir de Dios.
“Europa, construida sobre la fe en Cristo, arrancada de sus raíces cristianas, ahora está en un período de callada apostasía”, agregó el cardenal.
Por Catholic Herald. 24 de octubre de 2017.
[Traducción de Dominus Est. Artículo original]
*permitida su reproducción mencionando a DominusEstBlog.wordpress.com
[1] Nihilismo (del latín nihil, “nada”) es la corriente artística y filosófica que toma como base la negación de uno o más de los supuestos sentido de la vida. Forma en la que se sostiene que la vida carece de significado objetivo, propósito, o valor intrínseco.
