jueves, 22 de enero de 2015

Papa Francisco: Las familias numerosas no son causa de pobreza.

En Filipinas, un país tentado de imponer la planificación familiar para combatir la pobreza.
El Papa Francisco fuerte del magisterio de la Iglesia ha asegurado que “las familias sanas son esenciales para la vida de la sociedad” durante la audiencia del miércoles, 21 de enero, en el aula Pablo VI del Vaticano. 
Después de su viaje apostólico por Asia (del 12 al 19 de enero), en su primera audiencia general de vuelta al Vaticano, Francisco recordó su encuentro con las familias y los jóvenes en Manila, Filipinas. “Las familias sanas son esenciales para la vida de la sociedad. Da consolación y esperanza ver tantas familias numerosas que acogen los hijos como un verdadero regalo de Dios”. 
Opinión reductiva considerar las familias fuente de pobreza
“He escuchado que se ha dicho que las familias con muchos hijos y el nacimiento de tantos niños son causas de pobreza. Me parece una opinión reductiva. Puedo decir que la causa principal de la pobreza es un sistema económico que ha quitado la persona del centro  y ha puesto en su lugar al dios dinero. Un sistema económico que excluye y que crea la cultura del descarte que vivimos”. 
Evocando la imagen de San José que ha protegido la vida del “Santo Niño”, el Papa ha recordado sus discursos en Filipinas, nación con una veneración especial por este santo, que “es necesario proteger la belleza de la familia en el proyecto de Dios. Es necesario defenderla de las nuevas colonizaciones ideológicas, que atentan contra su identidad y su misión” aseguró.
Causas más profundas de la pobreza 
Filipinas, meta del último viaje apostólico del Papa, es un país que se debate entre pobreza, riqueza y devoción.
Por un lado, la población de Filipinas, el 80 por ciento de ella católica, ha crecido de 60,7 millones de habitantes en 1990 a 96,71 millones en 2012. Mientras que por otro, la riqueza del país se queda en pocas manos y la corrupción quita recursos a los pobres, como el mismo Francisco denunció en su visita al palacio presidencial (discurso 16.01.2015).
La pobreza en Filipinas es un mal que en los últimos seis años (2006-2012) no retrocede, lo que significa que 28 de cada 100 filipinos viven en la indigencia y que los planes para erradicar el problema han fracasado. El desarrollo impuesto desde el alto a las familias filipinas no da resultados.
Anticoncepción gratuita no es la solución para salir de la pobreza
Precisamente, en Filipinas se ha aprobado en abril de 2013 una polémica Ley de planificación familiar. El Tribunal Supremo de Filipinas declaró constitucional la Ley que promueve el uso de preservativos y la distribución gratuita de anticonceptivos para los pobres.
La Iglesia Católica logró que se declarará inconstitucional las provisiones de la Ley que obligaban a todos los ambulatorios, médicos y personal a ofrecer servicios de planificación familiar. Es decir, que los hospitales y estructuras católicas debían ser obligadas a regalar las píldoras anticonceptivas.
La Constitución de Filipinas, de 1987, ampara la idea del respeto incondicional a la vida. Por este motivo, los movimientos católicos lograron demostrar que la primera versión de la Ley de Salud Reproductiva era inconstitucional.
En este sentido, la Iglesia en los últimos decenios ha gritado a los cuatro vientos que el verdadero desarrollo del país consiste en mejorar las condiciones de vida de la población y no en regalar preservativos.
Filipinas tiene alrededor de 96 millones de habitantes y una economía que desde el año 2012 mantiene un promedio de crecimiento anual de 6 %, según datos del Banco Asiático de Desarrollo. Es un país que produce riqueza. El problema es dónde queda esta riqueza. 
La agencia nacional de estadísticas, destaca que en la actualidad, una familia filipina de cinco precisa ganar al mes 5.458 pesos (132 dólares o 101 euros) solo para cubrir las necesidades básicas de alimentación. 
Según datos de la ONU, el índice de fecundidad en Filipinas es de 3,19 niños por mujer. Al mismo tiempo, que el país se debate entre una riqueza mal distribuida e índices medio/altos de corrupción. En 2014, el país ocupó el 85 puesto entre 174 países en los niveles de transparencia.

sources: ALETEIA (21/1/15)